13/5/12

Héroes y piratas

Viñeta de xurxo
Todos los piratas tienen
atropellos que aclarar,
deudas pendientes y asuntos

de los que mejor no hablar.
J.M SERRAT

En el taxi, como en los mares del sur del siglo XVII, abundan los piratas.

Los piratas quedan muy bien en las canciones, en el cine o en los libros. Siempre nos ha caído bien ese delincuente de poca monta que termina siendo víctima de algún sicario de la mafia o fiel escudero del bueno de la película. Un policía no tiene gracia si no ostenta un oscuro pasado de alcohol, drogas, sobornos y asesinatos sin aclarar. Vestimos con un halo de romanticismo al mas sanguinario ladrón de bancos solo porque es mas guapo que el estirado y aburrido director de sucursal, al que ha metido una bala entre ceja y ceja porque intentó pulsar la alarma.
Nuestros héroes de ficción no siempre son buenos ejemplos a seguir.

Hace unos días vi un reportaje en televisión –no recuerdo la cadena– en el que hablaban de una banda de aluniceros que en su barrio eran unos héroes. Con coches previamente robados se estampaban en los escaparates de los comercios del centro, muy lejos de su barrio, eso sí. Cuando la policía o los reporteros de tv pasaban haciendo preguntas por la barriada, todo eran carreras y amenazas por parte de los vecinos.
"7.000 millones de euros. Es lo que el Gobierno calcula que tendrá que prestar a Bankia para empezar a hablar. No está claro si hará falta más dinero y ni siquiera que vayamos a cobrar. Tampoco es el primer cheque: el Estado ya había prestado antes otros 4.465 millones, hace dos años".
No es fácil hablar de piratas, de sus deudas pendientes y de asuntos de los que ellos no quieren oír hablar. Un alucinero, por muy de mi barrio que sea, aunque sea el chico de Lola la del quinto y que en el barrio se porte bien, es un ladrón. Al joyero que le ha reventado el escaparate, que se levanta todos los días a las seis de la mañana para mantener a flote su negocio, no le parece un héroe. Tampoco al dueño del coche, que le ha complicado la vida para una temporada y además se ha quedado sin coche.

Sobre Bankias, Urdangarines, Ratos y políticos corruptos de aquí y allá, que decir que no se haya dicho ya. Son peor que el alucinero. Son igual de piratas y ladrones que él, pero con un alcance mayor. Su capacidad para joder a la gente es inmensa y además no hay esperanza de que acaben en la cárcel. Los alucineros, mal que bien, temporadas entre rejas se pasan.
"Un grupo de taxistas que este lunes estaba de servicio en la T1 del Aeropuerto de Barajas han devuelto un maletín con una importante suma de dinero a una pareja de ancianos, con un elevado grado de minusvalía visual, que dejó olvidado el objeto en un portamaletas."
"Un taxista devuelve una cartera olvidada en su taxi con más de 3000 euros en su interior."
Un pirata, por definición, nunca devuelve una cartera.
Un héroe no tiene porqué ser guapo, ni rico, ni famoso. Los héroes de verdad nunca serán protagonistas en una de piratas.
Un pirata es un ladrón, por muy rico y guapo que sea, o por muy romántico que nos parezca.

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